Saturday, January 30, 2010

Thursday, January 28, 2010

Saturday, January 23, 2010

Sunday, January 17, 2010

Monday, January 11, 2010

"Avatar" (James Cameron, 2009)

El primer post del año nuevo habla de la última película que vi en el año viejo. Y va así:

Tal vez debía correr esa experiencia solo... Era emocionante estar en aquella sala de cine en la fría mañana, esperando a que apagaran las luces. Normalmente estoy o platicando con A o rumiando insultos hacia los mascachicles de las butacas de atrás. Mi matinee estaba casi vacía y había tiempo muerto antes de la cinta, así que pude medir con detalle mis sensaciones. Descubrí que me sentía como cuando era un adolescente (!) (aaarg)

El hype. El "esperar" una película no es algo me suceda a menudo. Ya no me convencen fácil. Tal vez por tratarse de Jimmy Cameron caí redondo. Corre la película. No pierdo un sólo detalle; quedo enganchado durante dos horas cuarenta o lo que dure. Hasta lamento que termine el show pues podría disfrutar los visuales y la emoción por horas.

Si los méritos de una película fueran su capacidad de alienarte, Avatar es una total ganadora. Ahora bien; se acaba la película y no me queda más remedio que encender el cerebro de nuevo.

Debajo de la fiesta CGI y la excelente factura, la historia es un hilo simplón y trillado, con algunos personajes pasables y otros de absoluta caricatura. Las tres (y cuatro) dimensiones del planeta Pandora rivalizan durísimo con las dos dimensiones de sus bellas marionetas. Aunque... los cuentos clásicos, los héroes de siempre, los cuentos que necesitamos, siempre son así. Sustancias básicas. Pregúntenle a George Lucas. Pregunten a los videojugadores. Los mitos! Etcétera. Todos sabíamos que veníamos a eso.

¿La música de James Horner? Sinfonías que gritan: "Oigan, soy Cara y Bella y Majestuosa!!". Ya no queda mucho lugar a donde escapar. Y añado últimos matices:

A Cameron le gustan los papeles femeninos fuertes. Creo que YA nos quedó clarísimo y eso está muy bien y YA nos dimos cuenta. :) Conexiones temáticas con Terminator, Aliens, Abyss, etc, quedan para otra ocasión, que son varias y muy nerds. Y se repite la fórmula de Titanic: chico pobre conoce a niña rica (humano torpe conoce a hembra-alien-super-chinguetas). Y muy aparte, sí que salen con sus gringadotas, pero -¡milagrosamente!- el gran churro de oro no pierde nunca el equilibrio. Cursi tal vez. Imperfecta gracias a Dios. Diosa.

Y se repite el caso de Titanic. Las taquillas TIENEN que rebosar en ganancias porque si no el barco se hunde con todos sus pasajeros y con sus cámaras multimillonarias y con su tecnología de punta. Hollywood salvado por los pelos nuevamente. Me recuerda al fenómeno LOTR de Peter Jackson; tal vez, un nuevo Cameron que hereda y continúa algo de Spielberg.

El tono de la película es tenso, optimista y ecológico. Romántico para ellas, bélico para ellos. Aunque creo que hasta la podría ver un bebé (!). Avatar quiere el Oscar y quiere tu dinero. Mi dinero ya se lo di dos veces y con mucho gusto. El Oscar no se lo daría nunca. Y tampoco que me importen mucho los Óscares... Y quien leyó hasta acá, ya lo sabe: Avatar no será la mejor película de la historia, pero sí uno de los mejores joyrides de mi década pasada. Y la vi 2D.

Olvidaba cerrar la historia: Salí del cine. Ya era de tarde pero la ilusión -satisfecha- permanecía viva en mi yo de 15 años. Queremos más de eso. ¡Malditos!